El indicador de confianza del consumidor disminuye un 8,3 puntos, hasta los 99,1 puntos, en el mes de enero. Sin contar con febrero, es un dato inferior al de todo los meses del año pasado, según la encuesta elaborada por el CIS.
Lo empuja hacia abajo el pesimismo de los ciudadanos sobre las expectativas de la economía española, que desciende para situarse en 105,7 puntos. Las personas ven dificultades para llegar a fin de mes y poder encontrar un trabajo, aunque el 30% sostiene que ninguna persona de su entorno se encuentra en situación de paro. También es el indicador de situación actual, que cae hasta los 92,4 puntos.
Respecto a enero del año pasado, el indicador de confianza retrocede medio punto. El descenso no es leve gracias a la ayuda del indicador de la situación actual que aumenta un 7,9% interanual.
Entre enero de 2015 y el mismo mes de 2016, la valoración de la situación económica del país mejora un 10,3%. Los consumidores observan más posibilidades de encontrar trabajo que a principios del año pasado, aunque hay que destacar que el indicador de situación actual va cuesta abajo desde agosto cuando alcanzó su pico más alto con 98 puntos.
Este dato positivo contrarresta con las expectativas de futuro. Desciende un 7,9% en tasa interanual. Los encuestados no creen en sus posibilidades de ahorro y consideran muy difícil poder adquirir bienes duraderos. Esto sumado al temor a la inflación y a la subida de los tipos de interés, provoca la caída de las expectativas de futuro.