La red social Twitter sufre un apagón mundial, durante una hora y media, pasados veinte minutos de las 9 de la mañana. Los perfiles podían consultarse, pero en más de la mitad de las cuentas el hilo de las conversaciones no actualizaba. Veinte minutos después de la caída, la compañía ha publicado un comunicado en el que admitía el problema y aseguraba que trabajan en la reparación.
El apagón de Twitter no es un grave problema para las empresas que tienen perfiles en la red social. Una caída completa del servicio de Internet sí repercutiría en su actividad, según Miguel Pérez Subía, presidente de la Asociación de Usuarios de Internet.
Los más afectados por la caída son los adictos a Internet. En España, este problema no está muy reconocido socialmente, pero en países como Estados Unidos, China y Corea del Sur, los jóvenes acuden a campamentos militares de reeducación para la desintoxicación digitial.
El último apagón mundial fue en 2014, y no es la primera caída que sufre la compañía este mes. El viernes pasado, algunos usuarios también tuvieron problemas de acceso a Twitter.
El apagón llega en un momento difícil. En contra de lo que puede parecer, la red social no es una de las compañías más rentables y en el último trimestre ha visto como el crecimiento de sus usuarios se estancaba, provocando una desaceleración de los ingresos por publicidad.