Como colofón a la primera temporada de este programa hemos dedicado el último espacio a resolver las dudas que han planteado los oyentes sobre combustibles renovables con Nacho Rabadán, director general de CEES; Víctor García Nebreda, Secretario General de AEVECAR; Salvador Guillén, Director General de ATliq; Miguel Sánchez Campos, Secretario de Codigasoil; y José Ramón Freire, presidente de Bio-E. Como siempre con Inés Cardenal, portavoz de la Plataforma para los Combustibles Renovables.
La primera consulta ha sido sobre el origen de estos combustibles. José Ramón Freire lo divide entre los de origen orgánico como los restos de poda o los aceites usados. También hay otros de origen no biológico que da lugar a otros combustibles con diferentes alternativas tecnológicas
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Repasamos las principales duras de los oyentes sobre los combustibles renovables. Responden: Nacho Rabadán, director general de CEES; Víctor García Nebreda. Secretario General de AEVECAR; Salvador Guillén, Director General de ATliq; Miguel Sánchez Campos, Secretario de Codigasoil; y José Ramón Freire, presidente de Bio-E. Como siempre con Inés Cardenal, portavoz de la Plataforma para los Combustibles Renovables.
Una realidad que no implica cambio en los motores
Nacho Rabadán recuerda que hay muchos mayoristas que ya tienen en estaciones de servicio los combustibles renovables y en muy poco tiempo estará disponible en todas las que lo reclamen. También Víctor García Nebreda señala que no hace falta ninguna adaptación en los motores a la hora de repostar. Además, Inés Cardenal, recuerda que ya la gasolina o el diésel que repostamos actualmente ya tienen un porcentaje de biocombustibles.
Desde el punto de vista de la distribución, Salvador Guillén, destaca que una de las grandes ventajas que tienen los combustibles renovables es que no tienen que cambiar nada de las infraestructuras, ni oleoductos o los tanques de almacenamiento.
Miguel Sánchez Campos, insiste en que estos combustibles renovables ya existen y pide que se haga una bonificación fiscal, ya que ahora pagan lo mismo que un combustible que contamina. Así los consumidores tendrían un precio competitivo y se incentivaría su uso.