En este nuevo episodio respecto a planes de reestructuración y segundas oportunidades, nos preguntamos, ¿cuál es el papel de los socios ahora? Y es que la normativa aprobada el 26 de septiembre permite una serie de cambios mediante fusiones, incrementos o disminuciones de capital, e, incluso, moderar o extinguir las relaciones de altos directivos. Hablamos de ello con Manuel Tolbaños, fundador de LBL Partners, y Marta Díaz, socio director de SURUS.
"La reestructuración permite que la suscripción de participaciones pueda pasar la propiedad de las acciones directamente a los acreedores", explica Manuel Tolbaños.
Puedes escuchar el programa completo en este podcast, con Luis Vicente Muñoz en Capital Radio:
El nuevo papel de los socios en los planes de reestructuraciónEn este episodio tratamos cuándo es posible expulsar a un socio de sus acciones tras la aprobación del texto redifundido de la nueva Ley Concursal
¿Puede provocar "litigiosidad" la nueva ley?
La nueva norma se antepone a la Ley de Sociedades de Capital. Con la legislación actual, apunta Tolbaños: "hay que hacer una valoración de la empresa, y si los accionistas no llegan a cubrir el valor de sus participaciones, se les puede echar fuera".
"La norma puede plantear bastante "litigiosidad", porque el nuevo texto habla de métodos de valoración de la empresa, no es algo empírico", justifica el fundador de LBL Partners. Los criterios empleados pueden dar valores para las empresas "muy dispares".
El caso Celsa
La empresa catalana es la primera piedra de toque de la ley. Celsa presentó la solicitud del concurso de acreedores, y los accionistas de Goldman Sachs y Deutsche Bank, con cerca de 1.000 millones de euros de deuda no pagada, presentaron un plan que implicaba la sustitución de la familia Rubiralta por un equipo elaborado por los acreedores. Mientras, el Gobierno amenaza con aplicar la Ley anti OPAs si no se llega a un acuerdo.
"Me chirría que en el primer caso que se da se pueda vetar que los acreedores hagan uso de las funciones que se les ha otorgado", opina Tolbaños.