Los accionistas de DIA han dado el visto bueno a la propuesta de LetterOne frente a la del consejo de administración. El resultado era previsible después de que la junta de accionistas haya reunido al 54,3% del capital, lo que en la práctica daba la mayoría al magnate ruso Mijaíl Fridman, quien a través de LetterOne posee una participación del 29% en los supermercados.
Según los datos que ha facilitado la organización, han estado representados 2.358 accionistas que poseen más de 338 millones de títulos.
Durante la junta, el consejero delegado de DIA, Borja de la Cierva, ha relatado la situación de la empresa y ha explicado cuándo empezó su deterioro. Una situación que comenzó en 2016 después de cinco años de éxito de resultados, momento en el que la empresa no reaccionó adecuadamente a los cambios del consumidor y justo cuando comenzaron las "irregularidades" detectadas en 2018.
Además ha argumentado que detrás de los problemas financieros de la firma está la caída de las ventas en superficie comparable, la falta de adecuación de su oferta y política promocional y una deficiente ejecución de la cadena de suministro.
También se ha dirigido a los empleados y ha señalado que quieren salvar la mayor parte de los empleos de DIA pero que el Expediente de Regulación de Empleo “es una medida ineludible” debido a la situación de la empresa.
Por su parte, Sthepan Ducharme, representante de LetterOne, ha explicado a los accionistas la propuesta del magnate Mijaíl Fridman que pasa por una oferta de 0,67 euros por acción y al compromiso de realizar una ampliación de capital de 500 millones de euros, sujeta a varias condiciones, entre ellas un acuerdo con los bancos acreedores.
Ducharme ha defendido esta propuesta frente a la del Consejo. Insiste en que la de LetterOne representa “un plan integral” y es mucho más favorable para los accionistas.