Ford ha anunciado a través del Comité de la Empresa que adjudica un motor híbrido de gasolina Duratec 2.5 para la fábrica de Almussafes (Valencia). De esta manera se garantizará la continuación de las instalaciones de propulsores en el futuro. Gracias a esta adjudicación, el centro no tendrá que ser cerrado.
Dicho motor híbrido se distribuirá también en el mercado europeo. La planta ya tenía pendiente esta adjudicación después de que en octubre de 2019 la empresa hiciera saber que desde 2022 hasta 2024 iban a ir perdiendo volúmenes de las mecánicas de gasolina Ecoboost 2.0 y 2.3, el cual monta para América del Norte y representa el 90% de su actividad.
El sistema de propulsión, según un comunicado, se importa a Europa desde la fábrica de Chihuahua, de México, equipado con los modelos Kuga, Galaxy y S-Max. Después de que todo este equipo sea llevado a la factoría valenciana, se sumará a esos motores, no obstante, irán perdiendo cadencia de forma progresiva hasta 2024.
También se producirá el propulsor GDI de gasolina 2.0, el cual comenzará a montarse el próximo verano. Sin embargo, este tendrá una fecha de caducidad marcada para finales de 2023 o principios de 2024, que suponen un 39% de las ventas de la empresa en Europa durante 2020.
Asimismo, la compañía ha aumentado un 50% su capacidad de ensamblaje de baterías de la factoría con una inversión de 5'2 millones de euros.
La despedida de Mondeo y la producción de otros vehículos
La compañía también ha informado que Mondeo dejará de ensamblarse a finales de marzo de 2022. Lo justifican aludiendo a que la demanda está dirigida actualmente hacia las siluetas SUV.
De momento, Galaxy y S-Max seguirán produciéndose hasta 2024. Por otra parte, también han confirmado que la furgoneta Connect continuará como mínimo hasta finales de 2023 o principios del 2024.