El director financiero de Volkswagen (Arno Antlitz) ha sido claro: la empresa alemana se enfrenta a un déficit de demanda de alrededor de 500.000 coches, el equivalente a la produccion de dos plantas. La automovilística alemana vive uno de los momentos más tensos de su historia: compramos menos coches en Europa (no se han recuperado los niveles pre Covid),y hace daño la competencia de los vehículos chinos más baratos y la subida del gasto derivado de las inversiones necesarias para la producción de híbridos y eléctricos. Dice Volkswagen que tiene uno, tal vez dos años, para dar un giro a la estrategia a su principal marca de automóviles. Es decir, Volkswagen estudia despidos y cierre de plantas en Alemania. Un drama para los trabajadores de la empresa que reconocen que "todo el mundo está preocupado por su trabajo".
Volkswagen estudia el cierre de fábricas y despidos en Alemania mientras los representantes de los trabajadores no descartan huelgas