El Banco Popular de China comenzará a implementar un ratio de reservas a algunos bancos que participan del mercado del yuan fuera del país. Según el comunicado del organismo, las nuevas exigencias de reservas entrarán en vigor el 25 de enero y no afectarán a la liquidez dentro de China. Desde diciembre de 2014 el coeficiente era cero, pero tras un año de preparativos las firmas "ya están en condiciones de entrar en la política de reserva de depósitos".
Según fuentes consultadas por Reuters, este aumento del coeficiente de reservas para los depósitos en yuanes en bancos de compensación es un intento más de frenar la especulación respecto a la divisa china.
El regulador monetario asegura que seguirá usando varias herramientas para mantener una liquidez amplía en el sistema bancario local. Al obligar a los bancos fuera del país a tener más reservas de yuanes se reduce la moneda disponible en el mercado, recortando más la oferta y haciendo más caras las operaciones especulativas.
En esta nueva regulación no están incluidos los bancos centrales o gestoras estatales de reservas, organizaciones financieras internacionales o fondos soberanos, según el comunicado del organismo. Sin embargo, el banco central no detalla qué porcentaje de fondos deberán depositar las entidades foráneas.