El Brexit está saliéndole caro a Reino Unido. Según apuntan los análisis de diversos bancos, los británicos habrían gastado una media de 600 millones de libras a la semana desde el referéndum. Es decir, un total de 87.000 millones desde el día 23 de junio de 2016 hasta este momento.
Casi el doble de lo que pregonó la campaña del 'vote leave' antes de someter la decisión al voto de los ciudadanos. Dominic Cummings, el cabeza de campaña, aseguró que de no haber sido por uno de los mensajes en relación al dinero que Reino Unido se gastaba cada semana por pertenecer a la Unión Europea, "habría ganado el sí a permanecer en la UE".
Esa fue una de las estrategias clave en la campaña del 'leave': un autobús que recorrió las calles de Londres con el siguiente mensaje: "Mandamos 350 millones de libras a la semana a la Unión Europea". Otros, como los de la imagen, optaban por el mensaje del dato diario.
Aunque parece que la jugada no les ha salido muy bien a los partidarios del Brexit. Han pasado de, supuestamente, gastarse 350 millones de libras a la semana en la UE, a gastarse 600 millones a la semana en el Brexit según Goldman Sachs. Y no es el único que ha realizado previsiones de este calado sobre el impacto económico del Brexit.
La agenda S&P Global Ratings ha publicado este jueves sus estimaciones: cree que Reino Unido ha perdido 6.600 millones de libras por trimestre en su actividad económica desde que votó a favor de abandonar la Unión Europea.
Pero esto no nos llega por sorpresa. Más bien, era un secreto a voces. De hecho, hace unos días conocíamos cuánto han almacenado las fábricas británicas por el temor a un Brexit dañino. El estudio, llevado a cabo por IHS Markit/CIPS, demostró que el crecimiento en los almacenes alcanzó su récord por tercer mes consecutivo.
Aunque las cosas se complican. Pasan los días y la posibilidad de un 'no-deal' o salida sin acuerdo parece cada vez menos remota. Y es que si para el 12 de abril Reino Unido no ha conseguido aprobar ningún acuerdo ni prorrogar la salida, todo apunta a que el temido 'no-deal' se hará realidad. De momento, Goldman Sachs le da una posibilidad del 15%. Pero si ocurre, el PIB británico caería un 5,5% y la libra esterlina se depreciaría un 17%.
El tiempo corre. Quedan ocho días para el 12 de abril y para lo que todo apunta será la fecha de salida del Reino Unido de la Unión Europea. Quizá los partidarios del Brexit tenían que haber pensado un poco más sobre el impacto económico de su decisión antes de haber metido la papeleta del 'leave' en el sobre el 23 de junio de 2016.