Sin embargo, febrero de 2021 pareció darle un respiro a la economía canadiense. Así, la tasa de desempleo se sitúa ahora en el 8.2%, mientras que ésta misma cifra alcanzaba el 9.4% el mes anterior, enero. Fue este mismo mes cuando la economía del país presenciaba la pérdida de más de 200.000 empleos, que se sumaban también a los cientos de miles perdidos desde el inicio de la pandemia en marzo de 2020. No es de extrañar pues que este repunte en el empleo producido en febrero sorprendiera en los mercados.
Carlos Valverde, comentarista de Tickmill, apunta: “El informe mejor de lo esperado del viernes debería aliviar las preocupaciones sobre las cicatrices generalizadas en el mercado laboral debido a la pandemia”. En efecto, este repunte en las cifras de la población activa canadiense coincide con la relajación de las medidas restrictivas que se impusieron a partir de la aparición del virus. Sin embargo, no todo son buenas noticias: esta inesperada bajada en el paro ha tenido lugar debido al repunte de los puestos de trabajo de más baja remuneración, tales como aquellos relacionados con el hospedaje y la restauración. Los puestos de trabajo de otras industrias, generalmente mejor pagados, apenas sufrieron variaciones entre los meses de enero y febrero. Además, la gran mayoría de los puestos creados se corresponden con contratos a tiempo parcial.
Así, para que el empleo en Canadá vuelva a niveles prepandémicos aún es necesaria la creación de más de medio millón de puestos de trabajo. Aquí es donde entra en juego la modificación del plan de inmigración canadiense, que quiere atraer a muchos más inmigrantes de lo que se había previsto antes de la crisis sanitaria. Así, el país norteamericano espera recibir este año a más de 400.000 residentes extranjeros, lo que discrepa con el objetivo anterior de 350.000 inmigrantes para el mismo período. Con este incremento espera Canadá rejuvenecer a su población y ayudar así a mejorar los números de población en edad de trabajar frente a aquella en edad de jubilarse.
Aún queda por ver qué ocurre con el COVID y qué repercusiones tiene en los próximos meses en cuanto a migraciones internacionales y empleo se refiere; pro ahora, tanto Canadá como el resto del mundo tendrá que esperar a que el 2021 y los programas de vacunación en desarrollo tengan el efecto positivo que tanto se espera