La confianza del consumidor británico baja a niveles que no se veían desde hace más de 20 años. En concreto, un 60% de los británicos cree que la situación económica va a empeorar en los próximos doce meses. Antes de que se celebrase el referéndum, solo el 46% tenía esta opinión. Es la mayor caída en el índice de confianza de los consumidores de Reino Unido desde 1994.
Este Barómetro de la confianza del consumidor, elaborado por la consultora GfK también ha recabado la opinión de los ciudadanos sobre una posible subida de precios. El 33% considera que sí lo harán, un 20% más que en el mes de junio.
Un estudio paralelo elaborado por la consultora BDO revela que el Brexit tuvo un impacto inmediato en los comercios británicos. Las ventas bajaron un 8,1% después del referéndum, respecto al mismo mes de 2015. Los comerciantes sufrieron su peor mes de junio en diez años, a pesar de que antes del plebiscito, las ventas se habían incrementado un 3,8%.