La Unión Europea apuesta fuerte por el hidrógeno. Ha impulsado medidas para producir energías renovables, como la Estrategia Energética 2020 y la Energy Roadmap 2050, que activan sistemas de almacenamiento de hidrógeno.
Aún así, hoy en día los combustibles fósiles representan el 53,2% de la energía primaria consumida en Europa. España este año va a exportar 30.000 millones de euros en petróleo. Según Javier Brey, director general de Industria, Pymes, Comercio y Artesanía del Gobierno de Aragón, parte de este dinero se podría utilizar para impulsar el hidrógeno y la economía local.
España es un referente en energías renovables, pero está a la cola de Europa. Respecto a los países del norte del continente, es uno de los que menos estaciones de repostaje de hidrógeno tiene. Fernando Fernández , ejecutivo de la Asociación Europea de Regiones productoras de Hidrógeno, destaca la importancia de impulsar esta elemento, porque será "la energía dominante del siglo XXI".
Para conseguir potenciarlo, entre el 13 y el 16 de junio, Zaragoza acoge el Congreso Mundial de la Energía del Hidrógeno. Acudirán compañías como BMW o Toyota, para exhibir sus vehículos de hidrógeno, y empresas que presentarán sus prototipos de pilas de combustible.
Las grandes tecnológicas del mundo no son ajenas a la importancia de este elemento. Por ejemplo Apple, está desarrollando una batería que podría llegar a durar hasta seis meses. Está lejos de sacarlo a la luz, pero ya lo ha probado en los sistemas del Iphone 6 y el MacBook.