El presidente de EEUU, el demócrata Joe Biden, firma la Ley de la Inflación que busca garantizar la “equidad” entre ciudadanos. Y es que la mayor economía de Occidente ha entrado en recesión técnica, tras caer su economía los dos primeros trimestres del 2022, como consecuencia de la escalada de precios por la guerra en Ucrania y la pandemia.
Sofía Torres aborda la inflación y la recesión técnica en la que habría entrado EEUU tras dos trimestres de decrecimiento a raíz de las declaraciones de James Bullard, presidente de la FED en St. Louis, para la CNBC. De fondo, la posibilidad de que la Reserva Federal eleve el precio del dinero 100 puntos básicos en su próxima reunión.
La Ley de la Reducción de la Inflación pretende crear normas tributarias más justas para evitar que, como en 2020, 55 de las corporaciones más grandes de EEUU no pagaran impuestos federales sobre la renta. Así, contempla un impuesto mínimo del 15% a las compañías con beneficios superiores a los 1.000 millones de dólares, mientras que busca el refuerzo de la agencia de recaudación para perseguir la evasión fiscal. Para Brian Deese, director del Consejo Económico Nacional, según ha explicfado en la CNBC:
Este proyecto de ley está abordando cuestiones que nuestro país no ha abordado desde hace mucho tiempo, como los medicamentos de prescripción y la lucha contra el cambio climático
Los fines sociales de la nueva Ley de Reducción de la Inflación de EEUU
La norma también busca impactar en la inflación aminorando el gasto sanitario de la ciudadanía, que pagan el triple que en otros países.
Asimismo, la Ley de Reducción de la Inflación contempla más de 400.000 millones de dólares en nuevas inversiones encaminadas a impulsar la industria de la energía verde y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, como parte de la lucha contra el cambio climático. En concreto, pretende, entre otras cosas, construir una economía de energía limpia para 2030 que incluye 950 millones de paneles solares, 120.000 aerogeneradores y 2.300 plantas de baterías.