La dirección del aeropuerto de Hong Kong ha anunciado hoy que se suspenden todos los vuelos de salida y llegada en lo que queda de día como consecuencia de las protestas que se llevan sucediendo en las instalaciones del aeropuerto durante las últimas jornadas.
Según las autoridades únicamente los vuelos que ya han embarcado tienen permiso para poder salir del aeropuerto hongkonés. Este anuncio se ha calificado de suma importancia ya que el aeródromo de Hong Kong es el octavo más concurrido del mundo, el cual ha llegado a registrar una afluencia de 74 millones de pasajeros a lo largo de 2018.
En las protestas que tuvieron lugar ayer entre los distritos de clase trabajadora de Hong Kong la policía persiguió a manifestantes, disparó gases lacrimógenos y utilizó sus porras, según apuntan fuentes cercanas a los manifestantes.
Ante las medidas de represión policial los miles de ciudadanos que critican las medidas de su gobierno tuvieron que retirarse del frente de batalla.
La violencia de estas protestas aumenta cada día tras dos meses de lucha contra un proyecto de ley que permite las extradiciones a la China continental. Debido a estas disputas el centro financiero asiático se encuentra en una crisis que es considerada la más grave en décadas.
Según Pekín otros países como el Reino Unido se meten en sus asuntos internos y alientan a los manifestantes chinos. El portavoz oficial del gobierno de la Oficina Comercial de Hong Kong y Macao, Yang Guang, afirma que los manifestantes utilizan objetos extremadamente peligrosos para atacar a la policía y que ven signos de terrorismo en China.