Los precios del aceite de oliva se disparan. Las sequías y las enfermedades que han afectado a las cosechas en Europa han provocado que en 2015 el precio del preciado producto se haya incrementado en un 20%. La producción mundial, mientras, cayó en torno al 30% el año pasado. Son datos del Consejo Internacional del Aceite de Oliva.
España, que produce cerca del 40% del aceite de oliva del mundo, ha visto cómo sus cosechas sufrían en los últimos años por las elevadas temperaturas en verano. Algo que también puede notarse este año. El Consejo espera que España produzca 1.2 millones de toneladas en 2016, una cifra mejor que la del año pasado, pero por debajo de la media del país, de 1,8 millones de toneladas anuales.
Otra de las grandes potencias del sector, Italia, también ha visto cómo sus cosechas se veían afectadas por una fuerte plaga, lo que ha provocado también un descenso de producción.
Eso sí, los elevados precios están perjudicando al consumo, ya que muchos compradores están escogiendo otro tipo de aceites. Según los datos del Consejo del Aceite de Oliva, el consumo mundial cayó un 7% en 2015.
El producto, no obstante, ha registrado un fuerte incremento de su consumo en las últimas décadas. Se consume ahora casi el doble que hace 25 años. Solo en ese período, las ventas en EEUU se han disparado un 250%.