La instalación de parques eólicos supone mucho más que la simple generación de energía limpia. Los beneficios económicos, sociales y de desarrollo que aportan estas infraestructuras a las comunidades donde se instalan pueden transformar positivamente el futuro de muchos municipios, especialmente en zonas afectadas por la despoblación.

Análisis con Juan Virgilio Márquez, director general de la Asociación Empresarial Eólica y Heikki Willstedt, director de políticas energéticas y cambio climático de la AEE en el programa Ondas del Viento:

Qué impacto tiene la energía eólica en los territorios donde se instalan los parques

Análisis con Juan Virgilio Márquez, director general de la Asociación Empresarial Eólica y Heikki Willstedt, director de políticas energéticas y cambio climático de la AEE

Mínima ocupación del territorio con máximo impacto positivo

Uno de los aspectos que destacan los expertos es la escasa ocupación territorial que requieren estas instalaciones. Según explica Heikki Willstedt, director de Políticas Energéticas y Cambio Climático de la Asociación Empresarial Eólica, "actualmente las poligonales de los proyectos ocupan alrededor del 0,2% de la superficie española, pero dentro de ese 0,2% solo se utiliza efectivamente el 5%. Por lo tanto, estamos hablando de menos del 0,1% de la superficie en los parques actuales".

Esta característica permite que los terrenos donde se instalan aerogeneradores puedan seguir siendo utilizados para sus actividades tradicionales. "Los terrenos que se utilizan para un parque eólico en un alto porcentaje se pueden seguir utilizando para las actividades previas: la agricultura, la ganadería, porque el parque eólico ocupa muy poco terreno. Realmente es una actividad muy poco intensiva en la ocupación de territorio", señala Juan Virgilio Márquez, director general de la Asociación Empresarial Eólica.

Impacto económico en las comunidades locales

El impacto económico de estas instalaciones en los municipios resulta notable. Márquez explica que "para un parque de tamaño medio o estándar de unos 50 megavatios, que son con el tamaño de máquina actual entre unas diez y 12 aerogeneradores, ya solo el primer año el conjunto de pueblos o el pueblo que recibe los ingresos estamos hablando de 3 millones de euros. Y luego hay unos ingresos recurrentes durante toda la vida útil del parque que pueden llegar hasta los 12 millones de euros".

Estos beneficios económicos llegan a través de diferentes vías: alquiler de terrenos, impuestos municipales como el ICIO ( Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras) y el equivalente al IBI, impuesto de actividades económicas y otros cánones regionales. Además, en muchos casos, los propietarios de los terrenos también reciben una renta anual por el alquiler, lo que mejora su economía doméstica.

El reto de la gestión de los recursos

Sin embargo, este repentino incremento de ingresos también plantea retos. "Hay algunos ayuntamientos que saben utilizar ese dinero y lo gastan en mejoras para sus ciudadanos, pero hay otros que, por el tamaño del ayuntamiento o porque no conocen cómo gastar ese dinero desde un punto de vista administrativo, se lo guardan", explicó Willstedt, quien señala que hay aproximadamente 60 millones de euros en cuentas bancarias de estos ayuntamientos que no se están utilizando.

Los municipios que han sabido gestionar estos recursos han invertido en "infraestructuras básicas, servicios de saneamiento, residencias de mayores, infraestructuras deportivas" e incluso servicios como "taxi a mayores para acercar a los mayores al hospital", comenta Márquez.

Generación de empleo y fijación de población

Aunque el sector requiere perfiles cualificados, también genera empleo directo e indirecto en las zonas rurales. "Al final los empleos directos requieren un conocimiento de la tecnología importante. La complejidad de un proyecto eólico es significativa y tanto el desarrollo del proyecto como la construcción, la instalación y la operación requieren empleo cualificado", señalan los expertos.

No obstante, también se genera "empleo indirecto asociado a la logística, la evaluación ambiental, y todo lo relativo a los empleos que se generan en la socioeconomía de la zona, como hostelería y residencia". Este empleo ayuda a fijar población en el territorio.

Para potenciar el empleo local, la asociación ha puesto en marcha iniciativas como Keep It Local, que busca dar formación a jóvenes de municipios rurales para que puedan incorporarse al sector:

El reto del consenso social

El sector trabaja activamente para conseguir la aceptación social de los proyectos. "Estamos trabajando haciendo mucha pedagogía, comunicando claramente qué implica un parque y derribando muchos mitos", explica Márquez, quien reconoce que existe "mucha desinformación" que genera movimientos de oposición en algunas comunidades.

Como destaca el director general de la Asociación Empresarial Eólica, "la eólica es una solución, no un problema. Es un medicamento, no una enfermedad. La eólica nunca va a quitar el estado de bienestar de los pueblos. Lo va a mejorar".