Un año complicado. Así describe Hermès, el famoso fabricante de bolsos francés, su escenario para 2016. El menor crecimiento de China, la fortaleza del dólar que frena la llega de turistas a Estados Unidos y los ataques terroristas en Europa están detrás de este pronóstico reservado.
El consejero delegado de Hermès, Axel Dumas, cree que en 2016 la demanda de sus productos será volátil y podría registrar un crecimiento de las ventas por debajo de la media de la empresa del 8% a tipos constantes. Dumas lamenta que el número de turistas que viajan a Francia no haya recuperado los niveles previos a los ataques terroristas de noviembre en París, y advierte de que todavía es pronto para estimar el impacto en el sector del lujo de los ataques terroristas en Bruselas.
En 2015 las ventas de Hermès han crecido a un ritmo del 8,1%, por debajo del aumento del 11% de 2014 pero por encima de lo que han crecido las ventas de competidores directos como Louis Vuitton o Gucci. El beneficio operativo de Hermés ha crecido un 19%. Por áreas geográficas, las ventas en Japón han mejorado un 18%, en Asia (ex Japón) un 5%, en América un 7% y en Europa han subido un 9%. En el caso de Francia los ingresos han mejorado un 6%.
En 2016 Hermès prevé subir sus precios en la eurozona entre un 3% y un 4% para reflejar el aumento de los costes en el producto, pero mantendrá los precios de sus prendas en el resto del mundo. Hermès ha aumentado los márgenes con los que trabaja hasta el 31,8%. Tras presentar resultados la compañía ha anunciado un aumento del 14% en el dividendo hasta 3,35 euros.
Hermès emplea a 12.244 personas en todo el mundo. Más del 50% de sus trabajadores están en Francia, donde la empresa ha aumentado su plantilla en 400 personas en el último año.
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