El encuentro tiene como objetivo acercar posturas entre ambos bandos. Las grandes tecnológicas respaldaron a Hillary Clinton para la presidencia y se mostraron contrarias a la visión de Trump. Durante la campaña electoral, el candidato republicano hizo declaraciones sobre la restricción de la migración y una mayor regulación de Internet, algo completamente alejado de la ideología empresarial californiana.
El encuentro espera enmendar las relaciones, pero de él no saldrán acuerdos concretos ni anuncios de inversiones. Sólo servirá para intercambiar puntos de vista, según Reuters.
Sin embargo, algunas compañías ya tomaron posiciones en su día. Es el caso de Google, que tras las elecciones comenzó a buscar lobistas de corte conservador para amoldarse al nuevo clima político de Washington y conseguir un punto de apoyo.