Gas Natural Fenosa registra un beneficio neto de 1.347 millones de euros en 2016, lo que supone un descenso del 10,5% respecto al año anterior, por la debilidad del negocio liberalizado de gas y la evolución de las divisas en Latinoamérica.
Las cifras están en línea con lo estimado por el consenso del mercado y también con lo previsto por la compañía, según explica a la CNMV, que espera un resultado neto de entre 1.300 y 1.400 millones de euros en 2016 y 2017.
El resultado bruto de explotación (Ebitda) alcanza los 4.970 millones de euros, un descenso del 5,6% respecto de 2015, "una vez discontinuado el negocio del gas licuado del petróleo de Chile". Se ha visto condicionado por un entorno "macroeconómico y energético muy exigente", que ha afectado directamente a la contribución del negocio de comercialización de gas. Además, la depreciación de las monedas latinoamericanas respecto del euro supone un impacto de 112 millones de euros sobre el Ebitda.
Por su parte, las inversiones netas ascienden a 2.225 millones de euros, con un aumento del 56,5% respecto de 2015.
Gas Natural también anunció que dejará de consolidar su filial Electricaribe tras tomar el control temporal de la misma el gobierno colombiano el pasado mes de noviembre, en medio de un contencioso por problemas de fraude y morosidad de clientes. La compañía catalana, que dijo entonces que se reservaba presentar acciones legales en Colombia, ha decidido contabilizar una provisión de 475 millones por su participación del 85 por ciento en Electricaribe.