La huelga de tripulantes de cabina de Ryanair en España convocada para los días 25 y 26 de julio puede ocasionar un caos absoluto en los aeropuertos españoles dejando en tierra a 200.000 pasajeros en los dos días de paro.
Los sindicatos españoles USO (Unión Sindical Obrera) y Sitcpla (Sindicato Independiente Tripulantes De Cabina De Pasajeros), han denunciado en los juzgados de instrucción de Madrid a la aerolínea por presuntas coacciones, al pasar un cuestionario a sus trabajadores para saber si secundarían los paros.
La Dirección General de Trabajo ha convocado una reunión con la dirección de Ryanair y los sindicatos que convocan los paros, para intentar pactar una solución a lo que el portavoz de relaciones externas de Sitcpla, Antonio Escobar, ha indicado "Estamos ante un batiburrillo del que esperamos que salga bien las próximas horas".
En la denuncia, los sindicatos señalan como responsables de los hechos al consejero delegado de la compañía, Michael O´Leary y, al responsable de personal, Eddie Wilson, así como, “a todas las personas que aparezcan como encubridores o cómplices”.
Mientras, el Ministerio de Fomento ha encargado a los servicios jurídicos del Estado un informe para conocer si la fijación de servicios mínimos contemplada por la legislación española puede ser aplicable a esta circunstancia.
A la espera de la reunión de los sindicatos USO y Sitcpla con la compañía, la Asociación de Empresas de Servicios de Asistencia en Tierra en Aeropuertos, junto con los sindicatos USO, CC.OO. y UGT, han convocado una huelga para finales de julio pidiendo la negociación de determinados capítulos del IV Convenio Colectivo de handling (huelga de personal d
e tierra de los aeropuertos) referentes a incrementos salariales, descansos entre jornadas y exceso de horas extraordinarias entre otros.