"Tras haber culminado con éxito el proceso de reestructuración de la entidad, ahora Bankia está preparada para iniciar una nueva fase de crecimiento, en la que la integración de BMN es tremendamente positiva porque nos permite completar la franquicia en unos territorios muy dinámicos en los que teníamos una presencia muy limitada", asegura el presidente de la entidad, José Ignacio Goirigolzarri.
Para el presidente, la operación "es muy positiva para los contribuyentes porque la unión de ambas entidades incrementa la capacidad de devolver las ayudas recibidas".
Se espera un crecimiento del beneficio por acción del 16% y el retorno esperado de la inversión (ROIC) será del 12% en el tercer año. La rentabilidad de Bankia, medida como el retorno sobre fondos propios (ROE), crecerá unos 120 puntos básicos.
La fusión permitirá alcanzar unas sinergias de 155 millones de euros a partir del tercer año, equivalentes al 40% de la actual base de costes de BMN, si bien se espera conseguir ya en el segundo año la práctica totalidad de ellas, 149 millones de euros.
Con la actual composición de los accionariados de las dos entidades (el FROB es el principal accionista de ambas), el reparto accionarial del banco resultante dejaría al FROB con un 66,56% del capital aproximadamente; los actuales accionistas privados de Bankia contarían con el 31,11%, y los accionistas privados de BMN, el 2,33%.