Cablevision Systems Corp ha aceptado la oferta de compra presentada por la compañía europea de telecomunicaciones por 17.700 millones de dólares, incluida la deuda. Las acciones de la norteamericana, controlada por la familia Dolan de Nueva York, han despuntado un 16% fuera de hora en el mercado, a 33,12 dólares.
Cablevision es el quinto operador de cable de Estados Unidos. Ofrece su servicio en Nueva York, Conneticut, Nueva Jersey y Pensilvania. También ofrece Internet y cuenta con cadenas de televisión de pago, además de ser el octavo proveedor de servicios de telefonía del país.
Esta operación se produce en medio de un escenario de consolidación entre las compañías de televisión por cable estadounidenses. Se enfrentan a la disminución de su cantidad de suscriptores, quienes prefieren consumir los servicios de plataformas en línea, como Netflix o Amazon. Las compañías más tradicionales buscan aliados para sobrevivir frente a las nuevas.
La holandesa ya tomó posiciones cuando Comcast renunció hace unos meses a la compra de Time Warner Cable, pero finalmente se la llevó Charter Communications. Altice no ha desistido en su empeño por crecer en Estados Unidos y pagará 39,40 dólares por acción de Cablevision. La compañía que dirige el francés Patrick Drahi ya opera en República Dominicana y en mayo compró la norteamericana Suddenlink Communications por 9.100 millones. El objetivo de Altice es crear un gigante en el sector de las telecomunicaciones estadounidense.