El Parlamento Griego espera convencer a sus acreedores europeos con una nueva subida de impuestos y más mecanismos de recortes automáticos para que finalice la primera revisión del tercer rescate, que esta semana estará sobre la mesa de negociación del Eurogrupo.
"Hoy se cierra un periodo difícil para el país y damos el primer paso para salir de la crisis, un periodo que también tendrá sus dificultades", aseguró el primer ministro Alexis Tsipras, que añadió que "los socios europeos reciben el mensaje de que Grecia respeta sus compromisos, ahora ellos deben demostrar que respetan los suyos" abriendo conversaciones para el alivio de la deuda.
Las nuevas medidas incluídas en la Ley Escoba, aprobada con los votos de Syriza y Griegos Independientes (Anel), introducen subidas de impuestos indirectos, incluido el IVA, con las que el gobierno de Alexis Tsipras espera recaudar un total de 1.800 millones de euros al año.
Además, la nueva normativa liberaliza la venta de créditos morosos a fondos de inversión, configura el mecanismo de recorte automático del presupuesto en caso de que el Gobierno no cumpla los objetivos de superávit acordados con los acreedores y establece un nuevo fondo de privatizaciones que sustituirá al antiguo TAIPED.
Imagen: Flickr: Gaspar Serrano