Ha concluido ya el encuentro en Japón, tras una segunda jornada del G7 centrada en adoptar una estrategia para promover el crecimiento y un plan de acción antiterrorista.
En el documento final han plasmado muchos de los acuerdos alcanzados ayer. Entre ellos los líderes han decidido aplicar estrategias coordinadas que combinarán estímulos fiscales, políticas monetarias y reformas estructurales, y además alertan de los riesgos que podría causar la salida del Reino Unido de la UE. La declaración final incluye puntos concretos como la necesidad de invertir en infraestructuras, educación y el sector digital, y subraya la importancia de impulsar los acuerdos de libre comercio. Así lo destaca el primer ministro de Japón, Sinzho Abe: "El Acuerdo de Asociación Económica, el Acuerdo de Libre Comercio es algo no sólo propicio para el crecimiento económico de Japón y la Unión Europea. El acuerdo será beneficioso para el mantenimiento o la incorporación de un crecimiento sostenible y sólido para la economía mundial".
Los líderes advierten del empeoramiento de la situación económica global debido a factores como la debilidad de la demanda y varios problemas económicos sin resolver. También por la escalada de conflictos geopolíticos, el terrorismos o los flujos de refugiados
Los líderes del G7 también aprueban otra declaración en el área de seguridad y de política de exteriores
Ahí se menciona una estrategia coordinada para combatir el auge del terrorismo y del extremismo en Oriente Medio, y también subraya la necesidad de apoyar a los refugiados que huyen de Siria. Respecto a Corea del Norte le insta a no llevar a cabo más acciones provocadoras. "Corea del Norte es una gran preocupación para todos nosotros. En este momento no están en el punto de alcanzar con eficacia los objetivos de EEUU, pero cada vez que se ponen a prueba, aunque fallen, aprenden algo. Y está claro que ideológicamente todavía están convencidos, sobre todo Kim Jong Un, de que su propia legitimidad está atada al desarrollo de armas nucleares". El G7 también expresa su preocupación sobre la situación en el Mar de China Meridional y enfatiza la importancia de resolver las disputas de forma pacífica.