El próximo 23 de junio, los británicos están convocados a las urnas, donde decidirán entre la salida y la permanencia del Reino Unido en la Unión Europea. Pero, ¿qué consecuencias tendría el Brexit para la economía española?
España está expuesta a la salida del Reino Unido, según el informe elaborado por AFI (Analistas Financieros Internacionales). El mayor de los motores de nuestra economía es el turismo. Casi 1 de cada 4 visitantes que llegan a nuestro país son británicos, de 15,5 millones de turistas que gastan 14 millones de euros.
Si finalmente los ciudadanos británicos deciden salir de la Unión Europea, perderían poder adquisitivo como consecuencia de la depreciación de la libra. Un menor flujo de turistas viajaría a España, aunque se vería menos afectada que otros países, como por ejemplo Francia, debido a su bajo nivel de precios en comparación con estos países.
El sector bancario también teme el Brexit, porque España está expuesta al sector financiero británico. Sobre todo a través del Banco Santander, que obtuvo un 30% de su beneficio bruto en Reino Unido, y el Banco Sabadell, con un 17,2%.
El comercio también se vería afectado. Reino Unido es el quinto destino más importante para las exportaciones españolas de bienes y servicios. Si el Brexit sale adelante, afectaría a los flujos de comercio, debido a la depreciación de la libra. Aparte del menor poder adquisitivo, los británicos perderían también confianza. La única solución que se ve en el horizonte es llegar, lo antes posible, a un acuerdo bilateral entre ambos países.
Pero no solo las exportaciones juegan un papel importante en la relación entre España y Reino Unido. La incertidumbre retrasa el flujo de fondos entre ambos estados. Hay que recordar que el país británico es el principal destino para la inversión española en el extranjero y que la inversión inglesa supone el 10% del total que recibe España.
Fuera de le economía, el Brexit también tiene consecuencias políticas. En el caso de Cataluña, Escocia puede ser un precedente de riesgo.
Además, España perdería un aliado en la Asociación Transatlántica para el Comercio y la Inversión.
Al resto de países de la zona euro también les inquieta el Brexit. Las estrechas conexiones con el Reino Unido se verían lastradas. Desde que los británicos entraron a formar parte de la Unión Europea, el comercio con el resto de países ha aumentado un 55%.