El oro y la Reserva Federal tienen una relación más estrecha de lo que podamos pensar. Y con la caída de la rentabilidad de los bonos y la guerra comercial de Trump contra el mundo, los traders ya ven más de un 50% de probabilidades de que la Fed baje los tipos en la reunión de Septiembre. Pero, ¿afectaría de alguna manera a los precios del oro una política monetaria más expansiva?
Hay muchas teorías sobre esto: algunas dicen que cuando suben los tipos de interés también lo hacen los precios del oro porque los inversores tratan de protegerse de las caídas que este movimiento de la Fed puede provocar en la renta variable. Y las cifras lo confirman: según un estudio de BullionVault, en el periodo entre 1986 y 2016, en los 12 meses posteriores a una subida de tipos el oro se ha revalorizado en un 61% de las veces.
Sin embargo, también hay partidarios de la teoría contraria: de que el oro se revaloriza siempre y cuando los tipos no suban. La Fed ya ha dicho que va a congelar los tipos, pero además los futuros ahora mismo están apuntando hacia una probabilidad por encima del 80% de que la Fed los baje por lo menos una vez hasta el mes de diciembre. El banco central americano no lo niega, pero advierte de que solo lo hará si se dan determinadas situaciones. Richard Clarida, el vicepresidente de la Reserva Federal, decía este jueves en el Club Económico de Nueva York que solo cambiarían su rumbo si la inflación permanecía por debajo del 2% y si surgían más riesgos a la baja.
Y según un análisis del World Gold Council, el oro se comporta mejor en los ciclos posteriores a unas subidas de tipos, aunque no siempre ocurre a la misma velocidad. Por ejemplo, en 2001, 12 meses después de que la Fed dejara de subir los tipos, el oro tuvo una subida acumulada de un 3,6%; sin embargo, en 2007 (cuando ya había pasado un año desde la última subida de la Fed) el oro se revalorizó un 19%.
Hay varias explicaciones para este fenómeno. Una de ellas es la basada en el “coste de oportunidad”, que asegura que si los tipos de interés se sitúan en mínimos la rentabilidad del oro puede estar por encima de la de aquellos activos que están muy relacionados con el precio del dinero, como los bonos.
Otra teoría tiene que ver con la relación del oro con el dólar. Lo que dice esta teoría es que el dólar suele salir fortalecido de una subida de tipos de la Fed y que ante esos movimientos de la moneda americana el oro suele caer porque se encarece para los compradores con otras divisas.
Pero estas no dejan de ser teorías y, tal y como apuntan desde el World Gold Council, no hay una prueba suficientemente contundente como para confirmar que una pausa en la política restrictiva de la Fed tenga siempre un impacto positivo en el oro.