Sebastián Albella, Presidente de la CNMV ha asegurado que el objetivo del supervisor español es agilizar las opas en curso para que lleguen cuanto antes a los destinatarios y de esta manera hacer que el tráfico fluya en los mercados.
Durante su intervención, ha asegurado que le resulta "incomodo" que se diga que la CNMV se toma tiempo en algunas operaciones, pero que no se puede hacer más rápido porque existen normas que a veces se demoran.
El jefe del supervisor también ha declarado que espera que se aclare la incertidumbre regulatoria que afecta a las SICAVS nacionales, tras desaparecer mas de 300 sociedades de este tipo.
Además, ha indicado que el paquete de medidas para la transposición de la normativa europea MiFID II, que entra en vigor en enero y establece nuevos requisitos relativos a los mercados de instrumentos financieros, está "muy avanzado" y que, en caso de demora en su aplicación, ésta va a ser "relativamente leve".
Albella ha repasado también los acontecimientos de 2017 y ha resaltado que los indicadores de volatilidad de los mercados "se han mantenido muy reducidos" pese a la resolución del Banco Popular, los atentados terroristas en Barcelona y la crisis catalana. Ha recalcado que el nivel de estrés por Cataluña ha bajado por la aplicación del 155 pero que aun así el procés ha afectado de forma negativa a la imagen de España.
A pesar de la crisis catalana, el supervisor ha contactado este año con más de 25 compañías interesadas en trasladar su sede o aumentar su presencia en España tras el "brexit", un tema en el que tienen "esperanza" en que se produzcan "sorpresas positivas".
Por último, Albella ha anunciado que la CNMV está elaborando mecanismos para recibir denuncias en formato anónimo sobre abusos de empresas cotizadas a través de su página web, y que están "abiertos" a la recepción de estos avisos, aunque desearían que el marco legal lo contemplara para funcionar con mayor tranquilidad.