El fantasma de la recesión ha vuelto. Y ha vuelto porque los economistas encuestados por Reuters vuelven a situar las probabilidades de una recesión en los niveles que tanto asustaron a los inversores a finales de 2018: creen que hay un 40% de probabilidad de que la guerra comercial con China inmiscuya a Estados Unidos en una recesión en tan solo dos años.
En la encuesta del mes pasado, los economistas descendieron las probabilidades a un 35%, la primera caída tras mantenerse en el 40% desde el mes de diciembre hasta marzo. Y según el 75% de los encuestados que respondieron a una pregunta adicional, las novedades de este mes en la guerra comercial entre Estados Unidos y China han hecho que la llegada de la temida recesión sea más probable.
Creen que del 3,2% que podría haber crecido la economía estadounidense en el primer trimestre, según la primera estimación publicada, el crecimiento del país americano podría caer hasta el 1,8% en el cuarto trimestre de 2020.
Y es que según los cálculos de Goldman Sachs, el coste de los aranceles puestos por Estados Unidos en 2018 ha recaído “íntegramente en las empresas y hogares americanos sin una reducción clara en los precios cobrados por los exportadores chinos”. De hecho, empresas como Walmart ya han advertido de que la subida de aranceles a China va a suponer un encarecimiento de los productos para los consumidores americanos. Dan Ikenson, director del centro de estudios de política comercial en el Instituto Cato, explica que "cuando los comerciantes tienen que importar productos finales, tienen que pagar el arancel a los servicios aduaneros de EE.UU. Al final aumenta el coste de producción para las compañías estadounidenses que fabrican productos que dependen de importaciones, y eso reduce sus márgenes de beneficio también. Los consumidores son los que al final van a pagar esos precios más altos y eso significa que el nivel de vida bajará porque su dinero no les llegará para tanto”.
Y la bola de cristal del experto que predijo con mayor precisión el desplome de las bolsas a finales de 2018 confirma la recesión. En una entrevista a Bloomberg el pasado lunes, Mike Wilson, jefe de renta variable en Morgan Stanley, explicó que lo que él llama el ‘indicador de ciclo’ (que incluye parámetros como la curva de tipos americana, la confianza del consumidor y el paro) pasó a una fase de caídas el mes pasado y dice que “eso siempre ha sido el precedente de una recesión económica”.