El directivo científico se refiere a aquellos que estudiaron una carrera científica y aplican el método científico antes de sacar cualquier conclusión. Aunque puede parecer lo deseable, esto no es factible como modus operandi ya que el directivo no cuenta con todo el tiempo ni todos los datos para actuar como un científico.
Esta manera de dirigir perjudica al equipo ya que su necesidad de precisión desmotiva y hacer perder tiempo al resto de compañeros. Sánchez Reina aconseja aceptar las limitaciones y enfrentarse a un único reto: confiar en su entorno.