Tugores defiende que el foro de los países más importantes del mundo tuvo cierta efectividad al comienzo de la crisis, pero su fuerza se ha disipado. El profesor señala que en la economía como en la vida, nos dejamos deslumbrar por recetas mágicas. Ante una economía mundial que va peor de lo que debería, se plantean medidas de corte neoliberal para animar al crecimiento potencial de la economía. Por otro lado, Tugores explica que el G20 propone acercar el producto potencial al real, mediante la inversión privada.
El catedrático también ha señalado que la recuperación japonesa a través de medidas ultraexpansivas ha sido artificial y ya apuntaba a una posible recesión.