El plan incentiva la instalación de puntos de carga para vehículos eléctricos en zonas públicas. Las ayudas destinadas a este aspecto podrían llegar a cubrir hasta el 40% del coste, llegando a los 15.000 euros en los puntos de recarga rápida. En cuanto a los automóviles, las ayudas dependerán del tipo de vehículo y del combustible. El plan durará hasta el 15 de octubre, o hasta que se acaben los fondos destinados al efecto.
Por ahora los fondos no son suficientes, y se habla de un nuevo plan de 50 millones de euros que pudiera establecer una continuidad. Pérez de Lucia insiste en la necesidad de ser cautelosos con este tipo de ayudas, ya que "pueden estar sujetos a modificaciones" hasta que se publiquen en el BOE y aún no hay nada confirmado más allá del plan Movea.