En un momento clave para el futuro de la industria automotriz europea, eurodiputados de diferentes grupos políticos como PP y PNV, dentro del grupo Renew Europe, coinciden en la necesidad de apostar por la neutralidad tecnológica para alcanzar los objetivos de descarbonización sin comprometer la competitividad del sector. De la agenda sobre este asunto para 2025 han hablado en Movilidad Renovable, el eurodiputado del PPE, Raúl de la Hoz; y la eurodiputada de Renew Europe, Ohiane Agirregoitia. Como siempre hemos contado con la participación de Inés Cardenal, portavoz de la Plataforma para los Combustibles Renovables.
En primer lugar, De la Hoz, destacó que "estamos de acuerdo en culminar el proceso de descarbonización, pero no en que se nos indique cómo llegar a la consecución de esos objetivos". Según explicó, "no puede ser que el futuro de la automoción lo vinculemos única y exclusivamente al vehículo eléctrico" y abogó por "abrir la puerta a otras formas, a otros motores, como los combustibles renovables, los e-fuels, los biocombustibles e incluso el hidrógeno".
Por su parte, la eurodiputada de Renew Europe, Ohiane Agirregoitia, advirtió que "no podemos eliminar una dependencia y generar otra" en referencia a la necesidad de preservar la autonomía estratégica europea. "Se trata de que los nuevos sistemas que utilicemos estén basados en soluciones tecnológicas que el propio mercado determine que son las mejores", señaló.
Escucha todo lo que han contado los invitados a "Movilidad Renovable".
El eurodiputado del PPE, Raúl de la Hoz; y la eurodiputada de Renew Europe, Ohiane Agirregoitia debaten sobre las políticas climáticas de la nueva comisión. También con Inés Cardenal, portavoz de la Plataforma para los Combustibles Renovables.
Un problema para los fabricantes de automóviles
Desde la Plataforma para los Combustibles Renovables, su portavoz Inés Cardenal respaldó esta visión: "La transición no se puede plantear como una guerra entre tecnologías, sino que solo con la complementariedad de todas ellas vamos a ser realmente eficientes".
El debate surge en un contexto donde los fabricantes europeos podrían enfrentar multas de hasta 15.000 millones de euros en 2025 si no cumplen con los objetivos de reducción de emisiones. Ante esta situación, los eurodiputados proponen revisar la reglamentación para considerar las emisiones durante todo el ciclo de vida del vehículo y no solo las del tubo de escape, permitiendo así contabilizar el impacto positivo de los combustibles renovables.