El gran problema de la brecha digital está en los puestos de trabajo medios y altos dentro de las empresas. Suelen ser las personas que realizan labores más manuales que de a poco se irán remplazando con tecnología. Por eso, para que estos trabajadores puedan "reciclarse" en el mundo laboral, la formación profesional debería adaptarse a un nuevo modelo: la formación tecnológica.
En una nueva entrega de Cibercotizante, José Joaquín Flechoso invita a Lola Santillana, secretaria confederal de Empleo, Cualificación Profesional y Migraciones de CCOO, para hablar de la brecha digital.
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España "está muy bien situada en determinados perfiles de calificación alta, pero no en medios y bajos" en términos de digitalización, señala Santillana. Por eso, reclama que más personas accedan a la formación digital en competencias básicas y medias digitales. En este sentido, Flechoso añade que en España, el 52% de las empresas encuentran dificultad de encontrar los perfiles que demandan.
Para explicar el poco avance que ha habido en el país respecto a la formación tecnológica, Santillana cita un ejemplo. "En 2011 el gobierno dijo que 200.000 plazas de formación profesional eran necesarias, estamos en 2020 y en el plan de modernización se vuelve a hablar de 200.000", comenta.
Pasar de lo "manual a lo intelectual", esto es lo que propone José Joaquín Flechoso de cibercotizante para cambiar el modelo de la formación profesional. En lugar de centrarse en el aprendizaje de un oficio, también incluiría competencias tecnológicas y las llamadas "soft skills". Es decir, aquellas como el trabajo en equipo y el liderazgo.
La ley de teletrabajo, un paso adelante en la digitalización laboral
"Era fundamental que se hiciera una ley del teletrabajo", señala la secretaria confederal de Empleo, Cualificación Profesional y Migraciones de CCOO. Si bien ni las empresas ni los trabajadores estaban preparados para afrontar este nuevo régimen laboral, un marco normativo brinda "una base fundamental a la digitalización".