Este domingo Italia vuelve a los colegios electorales después de que los socios del Gobierno de Mario Draghi le dejaran caer este verano tras una abstención histórica en el Parlamento. Había sido el primer ministro que más apoyo cosechó en la cámara italiana. Pero no fue suficiente para aguantar en lo que ya es una histórica fragilidad de los gobiernos italianos.
Las encuestas arrojan un resultado claro. Una coalición a tres del centro derecha parece ser la opción mayoritaria de la sociedad italiana para conformar un nuevo Gobierno. Liderado por la ultraderechista Giorgia Meloni (Hermanos de Italia) con el apoyo de Matteo Salvini (La Liga) y Silvio Berlusconi (Forza Italia), son muchos los interrogantes en política exterior y cooperación internacional que se abren en el horizonte político.
Por ello, lo analizamos al detalle en nuestra Entrevista Capital de este viernes con la ayuda de Matteo Re, profesor de la Universidad Rey Juan Carlos. En el siguiente podcast, puedes escuchar al completo la Entrevista Capital con Luis Vicente Muñoz.
Analizamos en clave geopolítica la cita electoral en Italia del próximo domingo con la ayuda de Matteo Re, profesor de la Universidad Rey Juan Carlos.
"No se va a proponer una salida de Europa"
Nuestro invitado capital da por descontada la victoria del trío derechista italiano por el funcionamiento de la ley electoral en Italia. Esta tiende a favorecer a aquellas formaciones que se presentan en coalición y, este domingo, las únicas organizaciones políticas que acuden bajo este paraguas son las del bloque conservador.
Matteo Re, lejos del miedo que puede observarse fuera de la península itálica, no considera que se vaya a producir un Italexit. Considera que la radicalización del discurso de Meloni busca más cambiar el funcionamiento de Europa que una salida de la Unión Europea. "Italia sabe perfectamente que necesita a Europa y Europa también necesita a Italia".
Añade que, en la práctica, el mayor euroescepticismo no viene de la mano del partido mayoritario, Hermanos de Italia, sino de la Liga de Salvini, por lo que se reduce considerable ese riesgo de fuga geopolítica.
Subraya, además, que el hecho de contar con un 25% de la sociedad italiana decantada por las proclamas ultras de Meloni se debe más a "un voto de castigo y decepción hacia los constantes cambios políticos en Italia".