Las empresas españolas creadas en los últimos años que más han crecido durante tres años consecutivos siguen operando mayoritariamente en sectores tradicionales –como comercio, alimentación, hostelería o construcción– y solo una minoría de ellas operan en los considerados más innovadores –e-commerce, TIC, biotecnología, etc.–, según se desprende del “Ranking 2017 de Empresas Gacela” elaborado por Iberinform y la revista Emprendedores.

En pleno boom de las startups, el e-commerce, etc., probablemente esperaríamos que las nuevas iniciativas empresariales surgirían en estos nuevos sectores. Pero no. Los sectores tradicionales siguen siendo el entorno en el que operan la mayor parte de las Empresas Gacela: comercio y servicios copan más del 50%, seguidos de industria, construcción, alimentación, transporte, energía, agricultura y ganadería. Mientras que solo hemos encontrado algunos casos paradigmáticos de e-commerce, como Funiglobal Development, Sport Club Padel Nuestro o The GoodYear Shoes Company, o de biotecnología, como el Instituto de Investigación Biotecnológica Farmacéutica y Medicamentos Huérfanos.



En conjunto, las 370 Empresas Gacela identificadas, aumentaron el importe neto de la cifra de negocios nada menos que el 1.090% en sólo tres años. Una subida que fue rebasada en el caso de los resultados netos (1.370%) y triplicada en los resultados de explotación (3.046%). 

En cuanto a la ubicación geográfica de las empresas gacela españolas, no se detectan grandes diferencias con respecto al panorama general. Las provincias que acumulan un mayor número de Empresas Gacela son Madrid y Barcelona (66 y 54, respectivamente). Si es destacable que, por debajo de éstas, destacan Valencia (30 empresas) y Alicante (29), y a mayor distancia Sevilla (18), Murcia (14) y Zaragoza (12).

Otros factores clave de estas empresas, que detecta este estudio, son el significativo incremento de sus márgenes comerciales (el margen sobre ventas conjunto era del -1,66% en 2012 y subió al 4,11% tres años después); mejores condiciones de cobro (el plazo medio se redujo de casi cuatro meses en 2012 a mes y medio en 2015) o la eficiencia de su equipo humano (las ventas por empleado se duplicaron en el trienio analizado, a pesar de que todas aumentaron sus plantillas). En total estas empresas tenían contratadas a 9.350 empleados en su último ejercicio disponible.