Estados Unidos tomará una decisión sobre la actividad de la petrolera española Repsol en Venezuela en los próximos días, dijo el jueves el representante especial estadounidense para el país latinoamericano, Elliott Abrams.
Desde que Estados Unidos impuso nuevas sanciones a Venezuela y a su empresa petrolera estatal PDVSA, los principales proveedores de productos de petróleo y derivados del país han sido Repsol, la petrolera estatal rusa Rosneft, la india Reliance Industries y las plataformas de contratación Vitol y Trafigura, según fuentes y datos de seguimiento de barcos.
Repsol asegura que cumple plenamente con todas las leyes y sanciones con respecto a Venezuela y que vigila de cerca la situación carguero por carguero.
Preguntado si había hablado sobre los negocios de Repsol en Venezuela durante su visita a Portugal y España, Abrams dijo que los funcionarios españoles habían planteado el problema.
"Este es un caso que la propia Repsol ha planteado en Washington y está bajo una discusión muy activa en este momento tanto en Washington como aquí", dijo Abrams.
"Creo que se tomarán decisiones sobre esto en Washington en los próximos días", añadió, aunque se negó a detallar la naturaleza de cualquier decisión.
La Casa Blanca está llevando a cabo una campaña para expulsar del poder al presidente venezolano Nicolás Maduro y respalda al líder opositor Juan Guaidó.
Abrams dijo que se habían discutido nuevas sanciones de Europa contra el gobierno de Maduro durante su visita, pero que cualquier decisión debía ser tomada por la Unión Europea.
"Impondremos las sanciones que creamos necesarias", dijo Abrams, agregando que la UE ya había tomado alguna medida por su cuenta.
"Esa es una decisión de la UE y esperamos que sea un tema de discusión en la UE", dijo.
Desde noviembre de 2017, la UE ha embargado exportaciones a Venezuela de armas y equipos para la represión interna, así como establecido una prohibición de viajar y congelado activos de 18 altos responsables venezolanos acusados de violar los derechos y socavar la democracia.
Bruselas ha dicho que Europa está considerando nuevas sanciones si Venezuela no toma medidas hacia un proceso democrático justo.