“Es mucho más placentero quedarse en los despachos teorizando sobre el sexo de los ángeles, que bajar a la arena para vivir las dificultades que encuentran nuestros colaboradores cada día”. ¿Cómo podemos reconocer a un directivo bizantino? Los conoceremos si encajara en alguna de estas tres manifestaciones que nos trae hoy Daniel Sánchez Reina: parálisis por análisis, competencia inconsciente y monologismo enfocado.
Escucha la entrevista completa:
*Lo sentimos pero el audio ha sido eliminado