La compañía presidida por Ignacio Sánchez Galán ha achacado el crecimiento del beneficio a los negocios de Redes, principalmente en Estados Unidos, y Renovables, así como a la integración desde septiembre de Neoenergia en Brasil, y a pesar del pobre comportamiento de la generación en España por el fuerte impacto de la sequía.
En 2017, las inversiones alcanzaron los 5.891 millones de euros, un 38% por encima de las de 2016, que se centraron en los negocios regulado, de energías renovables y de generación mediante contratos a largo plazo. Un 72% del total se destinó a crecimiento.
Asimismo, la reforma fiscal en Estados Unidos, anunciada el pasado mes de diciembre, supuso un impacto neto positivo de 1.284 millones de euros, que la compañía ha destinado casi en su totalidad a provisiones y ajustes de valor de ciertos activos, lo que ha reforzado su perfil de negocio.
En 2017, la filial de Iberdrola en Estados Unidos (Avangrid) aumentó su beneficio neto ajustado un 6%, hasta los 682 millones de dólares (553,8 millones de euros).
La compañía propondrá a la junta general de accionistas, convocada para el próximo 13 de abril, una remuneración anual con cargo a 2017 de 0,32 euros brutos por acción, un 3,2% más que en 2016.
Agencias