AT&T oficializó la compra de Time Warner el pasado 14 de junio por un total de 85.000 millones de dólares a pesar de la oposición del Ejecutivo del presidente Donald Trump que advertía de las supuestas consecuencias tendría para los consumidores. El Gobierno de EEUU decide ahora alegar la fusión de la dos grandes empresas de telecomunicación que un juez federal ya autorizó el mes pasado.
El Gobierno tenía un plazo de 60 días para apelar el fallo. El Departamento de Justicia elevará la causa Tribunal de Apelaciones del Circuito para el Distrito de Columbia. Con el nuevo recurso,el futuro de la operación es incierto y habrá que esperar a lo que considere la corte de apelaciones.
La fusión, que se conoce desde octubre de 2016, atiende al cambio del sector, según AT&T, tras la aparición de las plataformas digitales. Con la fusión se englobarían CNN y CNT además de HBO y los estudios de Warner Bros, por ejemplo. Según el Gobierno, la fusión generaría un aumento de sus precios y podría bloquear a los creadores de contenidos.
La sentencia que autorizaba la fusión de las compañías supuso un duro golpe para el Departamento de Justicia. De confirmarse, puede sentar precedente para nuevas fusiones en el sector y posibilitar la formación de compañías de gran tamaño que abarquen las telecomunicaciones y la producción de contenidos.