Los consejos de administración de Unicaja y Liberbank se reunieron ayer y han llegado a un acuerdo por el que inician formalmente las negociaciones para la fusión.
Este hecho tiene lugar tres días después del anuncio de contactos “preliminares” entre ambos bancos, un acontecimiento que hizo que ambas entidades se dispararan en la apertura bursátil del día 5 de octubre.
Las acciones de Unicaja reaccionaron con subidas de un 13%, y las de Liberbank ascendieron en un 20%.
Los asesores que estarán presente en la negociación ya han sido elegidos. Esto supone un paso importante para comenzar a trabajar de forma inmediata.
Unicaja contará con los servicios de asesoramiento de Uría Menéndez, PwC y Mediobanca. Por su parte, Liberbank estará asesorada por Ramón y Cajal, Deloitte y Deutsche Bank.
Precisamente, son los mismos asesores que estudiaron la operación en el intento de fusión que finalmente se frustró en mayo del 2019 por la incapacidad de llegar a un acuerdo respecto a la ecuación de canje.
Así valora la posible fusión Álvaro Blasco, director de ATL Capital:
El director de ATL Capital, Álvaro Blasco, prevé unas consecuencias positivas si ambas entidades bancarias se acaban uniendo.
Un contexto distinto a las anteriores negociaciones
El coronavirus ha variado sustancialmente el contexto, y las negociaciones tendrán que empezar de cero ante el empeoramiento de la situación económica.
Las cifras que se manejaron entonces, una participación cercana al 60 % para Unicaja Banco y al 40 % para Liberbank, probablemente no serán las mismas en estas nuevas negociaciones.
En esta línea, algunas fuentes apuntan a que Liberbank podría reclamar una posición más ventajosa.
Si las negociaciones llegan a buen puerto y ambas entidades finalmente se unen, crearán el quinto banco más importante de España, con 108.826 millones de euros en activos, según datos de junio del 2020. Además, la fusión significaría que pasarían a contar con 9.972 empleados en plantilla y 1.608 oficinas.