A S&P no le inquieta especialmente el nuevo Gobierno, pero sí le pide más claridad sobre sus políticas económicas y presupuestarias. Dentro de esas políticas, la reforma laboral es un punto clave: una derogación completa pondría en peligro la calificación crediticia en España. Dicho de otra forma: sería motivo suficiente para que la agencia de rating nos bajase la nota.
Pero no todo es negativo. "Los retoques de la reforma laboral pueden ser positivos si se limitan a combatir problemas estructurales como la temporalidad y la precariedad", señala Marko Mrsnik, director de ratings soberanos de S&P Global Ratings en una entrevista a Capital Radio.
Entrevista a Marko Mrsnik, director de ratings soberanos de S&P Global Ratings
¿Conseguirá Sánchez sacar los presupuestos?
"Es pronto para hablar de ello", reconoce Mrsnik. Se trata de una cuestión que la agencia vigilará durante los próximos meses. En cualquier caso, S&P prevé que el déficit de España se situará alrededor del 2% en 2020 a falta de conocer la política presupuestaria del Ejecutivo de Sánchez. Se compromete a bajar el déficit, aunque "la pregunta es si lo va a conseguir".
S&P pronostica un crecimiento del 1,7% del PIB este año, lo que supone tres décimas menos que el año pasado. Para 2021, el crecimiento será menor, del 1,6%. Aun así, España crecerá por encima de la media europea y eso "le otorga capacidad para bajar las vulnerabilidades como el déficit o la elevada tasa de paro", según Marko Mrsnik.