La rigidez regulatoria y el exceso burocrático está haciendo que las empresas españolas se estén yendo a Estonia. Sobre todo las startup. La razón principal es lo fácil que es, gracias a la elevada digitalización del país.
Lo explicaba en Capital Radio José Luis Casal, experto en innovación, estrategia y transformación digital:
Lo explica José Luis Casal, experto en innovación, estrategia y transformación digital
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Si eres autónomo en España, tienes que pagar la cuota mensual de unos 280 euros. En Estonia no pagas nada.
En cuanto a los impuestos, en el país báltico no pagas ningún impuesto por el dinero que ingresas en tu empresa. Empiezas a pagar impuestos cuando te asignas un salario o repartes dividendos.
Esto significa que cuando acaba de arrancar tu empresa, que apenas tiene ingresos, no tienes que pagar impuestos, lo que facilita enormemente poder empezar y crecer.
La forma de pagar impuestos en España es, habitualmente, a través de un gestor, con demasiado papeleo y trámites burocráticos que a menudo resultan ininteligibles para los implicados.
Si tu empresa está en Estonia, todos los trámites los haces online, con tu DNI electrónico.
¿Cómo establecer una empresa en Estonia?
El país lleva décadas digitalizando toda su administración y casi todo se hace online. Fue el primer país en permitir votar a través de internet, hace ya 15 años. Incluso buscar aparcamiento se hace a través de una app, para evitar estar dando vueltas.
Por supuesto, puedes abrir una cuenta bancaria por internet y realizar todos tus trámites a distancia. La banca del país es más flexible.
De hecho TransferWise, firma especializada en transferencias de cambio de divisas en línea entre particulares, con comisiones mucho más bajas que cualquier banco tradicional, fue fundada por un estonio.
Estonia implemento en 2014 el E-Residency, una tarjeta de residencia digital, que cualquier ciudadano del mundo puede solicitar. No te permite residir en Estonia, pero sí te sirve por ejemplo para montar una empresa allí
Su coste es de 100 euros y te llega a la embajada de Estonia en el país que solicites. Y montar una empresa puede rondar los 400 euros. Según los datos de 2019, había unos 630 e-residentes españoles en Estonia.
Una de las conclusiones principales a las que se llegó en la cumbre empresarial que organizó la CEOE para la recuperación es que se debe avanzar en digitalización.
Sobre todo para las pymes, que lo tienen más difícil, pero también debe hacerse en la administración, para facilitar y simplificar trámites. Y viendo el ejemplo de Estonia, España tiene un largo camino por recorrer y razones de sobra para hacerlo.