La banca española continúa con su proceso de concentración, lo que lleva aparejado un proceso de reestructuración en el que desde 2008 han cerrado 17.000 oficinas, lo que ha supuesto la pérdida de 81.575 puestos de trabajo. Un proceso que no ha terminado, pero que si empieza a tener una "cara b", en forma de contratación. Juan José Berbel, director general para España y Portugal de Moa BI Group, explica el proceso.



Desde Moa BI Group destacan que ha cambiado el perfil del trabajador de banca, empujado por las nuevas tecnologías hacia un nuevo formato en el que no solo se requieren conocimientos financieros, sino que es necesario un cierto conocimiento de las nuevas tecnologías, la informática y los cambios de tendencia. En este sentido, asegura Berbel que en los próximos años será necesario identificar esas tendencias y enfocar el producto hacia el cliente, incluso si el cliente no pisa una oficina porque todo se realiza de forma virtual. Un proceso de transformación que admite nuevos trabajadores, pero que deja fuera, en buena medida, a los mayores de 45 años.

El sector financiero sufre los mismos cambios y utiliza los mismos métodos de contratación que el resto de sectores, de manera que priman los contratos en prácticas o temporales para los nuevos trabajadores, que en su mayoría tienen entre 25 y 35 años.