Los inversores vigilan con especial atención la evolución de la inflación, algo muy importante porque está ligada al nivel de los tipos de interés que están en niveles históricamente bajos. La pregunta es dónde se estabilizarán esos tipos de interés algo relevante porque afecta a la valoración de todos los activos como la bolsa, los bonos o los inmuebles.
Ofelia Marín-Lozano, consejera delegada de 1962 Capital SICAV, aborda en esta entrevista con Luis Vicente Muñoz cómo puede evolucionar la inflación a corto y a largo plazo y su repercusión.
Escucha aquí la entrevista completa.
Inflación a corto plazo ¿qué pasará?
Marín-Lozano cree que a corto plazo, va a haber un repunte relevante de la inflación general (que incluye precios de la energía) pero es previsible que sea algo temporal.
El motivo principal será la comparación respecto al año pasado cuando los precios del barril de petróleo estaban en torno a 30 dólares con los de este año por encima de 60 dólares. "Esto puede elevar entre un 1,5% y un 2% la inflación. Por tanto podremos ver al IPC con subidas de un 2% o incluso el 3%, pero será algo previsiblemente temporal"
...y a largo plazo?
A largo plazo, sin embargo, la inflación la dirigen los sueldos, comenta la consejera delegada de 1962 Capital SICAV. Las subidas de salarios dan lugar a inflación y ahora mismo no se ven por el efecto de la globalización.
En los últimos 10 años, hemos tenido tipos de interés extremadamente bajos y con precios también muy bajos. Según Marín-Lozano, el dinero no ha llegado realmente al ciudadano y no ha hecho que suban los salarios.
La globalización supone también la externalización de producción hacia otros países con mano de obra más barata y hay cierta homogeneización en los niveles de precios y también en los niveles salariales.
"Es una fuerza contraria a que suban los sueldos" y, por tanto, el alza de los tipos de interés por parte de los bancos centrales tampoco es tan urgente. Las subidas de tipos también pueden utilizarse para frenar burbujas que se hayan generado de determinados activos y, en ese sentido, sí podríamos ver un repunte de las tasas hacia una “normalización” frente a las actuales.
La gestora comenta que aunque hemos tenido una eclosión de deuda pública, también es cierto que la factura, el coste de financiación, no está aumentado debido a que tanto las empresas como los gobiernos han renegociado esa deuda a tipos más bajos. “El coste medio de la deuda ha ido bajando y por tanto la deuda es asumible”, señala.
Según esta experta, en cualquier momento puede llegar una corrección del mercado tras las subidas acumuladas pero también sostiene que no hay alternativa a la renta variable donde seguirán llegando fondos.
Seguirán creciendo empresa de tecnología y las grandes marcas de consumo global y de lujo pero también espera un buen comportamiento para automovilísticas, bancos, petroleras y telecos.