Después de afrontar cuatro elecciones generales en cuatro años. Y con el panorama que ha quedado en este 10 de noviembre, las opciones parecen solo dos: un gobierno socialista con el apoyo de Unidas Podemos, la nueva formación de Íñigo Errejón, Más País, y los independentistas.
Luis Vicente Muñoz, CEO de Capital Radio, explica qué escenario queda tras los comicios.
En este sentido, Pablo Iglesias se ha ofrecido ya a negociar y a tender la mano a Sánchez… pero bien es verdad que en el primer discurso de anoche, decía que veía claro que hace falta un gobierno con representación proporcional a lo que han obtenido en las urnas. Algo a lo que los socialistas podrían no estar muy por la labor.
La opción B parece una coalición entre PP y PSOE. Algo que no gusta ni a los propios electores socialistas (a juzgar por los cánticos que entonaron anoche en la sede del PSOE, durante el discurso de Sánchez). Pero que sí podría ser la opción favorita del Ibex35, porque daría estabilidad, podría garantizar con más tranquilidad que se cumplen los compromisos con Bruselas y con una sombra de recesión a la vuelta de la esquina, los mercados se quieren asegurar un gobierno estable. Y es que si algo no gusta a las bolsas es la inestabilidad: el Ibex35 ha perdido desde el 28 de abril, los últimos comicios, un 1,5%.
Retos del próximo gobierno
El nuevo gobierno, sea el que sea, tiene por delante duros retos: lo primero, aprobar unos nuevos presupuestos, ya que seguimos gobernando con las cuentas de Cristóbal Montoro, aprobados en 2017 para el año 2018. Y además tienen que solucionar temas tan importantes como la reforma del sistema de pensiones, alcanzar un pacto en educación o conseguir la tan ansiada creación de empleo.
Y es que si viene otra crisis, nos pilla peor preparados que en la anterior, de 2008. Hay más paro, especialmente en el caso de los jóvenes y mayores de 45 años. En cuanto a la seguridad social, el agujero es ahora de unos 18.000 millones, mientras que en 2008 se terminaba el año con un superávit de unos 14.000 millones.
Esos serían, digamos, los retos clásicos, los que nos preocupan desde hace años. Pero es que ahora entra en escena además el reto de adaptar la Administración Pública a un contexto 100% digital o establecer metas creíbles pero ambiciosas en materia de descarbonización, que cumplan además con las exigencias de Bruselas.
Lo que no gusta a los mercados
El Ibex35, o al menos algunos de sus integrantes, miran esperanzados a un pacto entre PP y PSOE, para evitar la entrada de Unidas Podemos en el gobierno. ¿Por qué? Pues por ejemplo porque la formación morada aboga por recuperar los 60.000 millones de euros que supuso a las arcas públicas el llamado “rescate a la banca”. Algo que para Banco Santander o Bankia podría ser un duro varapalo.