El Banco de España considera recomendable aumentar "de forma drástica" la capacidad de detección y rastreo de casos positivos de COVID-19, a la vista de los costes socioeconómicos que han tenido medidas de contención a corto plazo como el confinamiento.
- El 'split' de Apple expulsa del Dow Jones a un histórico
- Astrazeneca prepara su fármaco con anticuerpos contra el Covid-19
La entidad ha publicado este martes un documento en el que cita un estudio internacional que concluye que el coste mensual de implementar esta estrategia en todo el mundo (realización de test a gran escala y aislamiento de quienes den positivo) sería inferior a las pérdidas económicas que la pandemia podría provocar en menos de una semana.
En el documento "Medidas de contención, evolución del empleo y propagación del COVID-19 en los municipios españoles", la entidad defiende que la búsqueda exhaustiva de casos y el rastreo de sus interacciones sociales permitiría aislar los casos diagnosticados y sus contactos, y facilitaría la contención inmediata de eventuales focos locales.
Diferencias entre municipios
En el informe se constata que la propagación del virus durante el mes de abril habría sido más contenida en aquellos municipios con un mayor grado de paralización de la actividad económica y reducción del empleo inducida por los cierres sectoriales.
En concreto, los municipios que han sufrido una mayor incidencia de la pandemia se caracterizan por presentar temperaturas más frías, una mayor densidad de población, una menor distancia a la capital de la provincia y una población más envejecida, resultados que están en línea con la evidencia internacional disponible.
Según el análisis, hasta el 30 de abril, un incremento de 100 puntos porcentuales en los cierres sectoriales (suspensión de las actividades no esenciales) reduciría el crecimiento del empleo municipal en 21 puntos, mientras que en términos sanitarios habría una reducción estimada de los contagios de dos casos por cada cien habitantes.
De acuerdo con los datos que recopila el documento, en los 8.091 municipios con actividad empresarial, el 21 % de las empresas se vieron obligadas a suspender su actividad durante el cierre total de toda actividad no esencial entre el 30 de marzo y el 9 de abril.
No obstante, en algunos municipios eminentemente agrícolas ninguna empresa se vio afectada, mientras que en otros más expuestos al turismo o la hostelería cerraron el 100 % de las empresas.