No sólo no abrirán los bancos, sino que tampoco lo hará la Bolsa de Atenas, un cierre que podría prorrogarse también a una semana, por decisión del Consejo, en una serie de medidas excepcionales que contemplan también controles de capital.
Horas antes de confirmarse el cierre de los bancos, las declaraciones de Varoufakis a la cadena británica BBC volvieron a sacar a mediodía de hoy a la gente a la calle tras un provisional retorno de la calma y después de que la Unión de Bancos de Grecia diera órdenes el sábado por la tarde de reponer fondos en todos los cajeros que se habían quedado sin dinero.
Un poco antes, era Capital Radio, a través de su Consejero Delegado, Luis Vicente Muñoz, era quien confirmaba a través de distintas fuentes que el "corralito" era la decisión del Gobierno griego.
La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, ha expresado su "decepción" por la falta de acuerdo sobre la crisis griega e insiste en la disposición de este organismo a ayudar para encontrar una solución.
"He informado al Directorio Ejecutivo del FMI sobre el resultado inconcluso de las recientes discusiones sobre Grecia en Bruselas. Expresé mi decepción y subrayé nuestro compromiso para continuar comprometidos con las autoridades griegas", ha asegurado Lagarde en un comunicado.
Los líderes de Francia y Alemania ya han convocado reuniones de urgencia. Angela Merkel se reune este lunes con los líderes del resto de partidos para evaluar la situación. Por su parte, François Hollande, ha convocado para este lunes a las 9.00 horas un Consejo de Ministros de urgencia.
Por ahora, Grecia sigue conectada a las líneas de liquidez de emergencia del BCE.