El Brexit sigue sin dar señales de vida. O al menos eso reflejan los datos del PIB británico, que crece un 0’5% en el tercer trimestre del año: por debajo del 0’7% del trimestre anterior, pero por encima de las previsiones, que apuntaban a un 0’3%. Se trata de la primera cifra de magnitud tras el resultado del referéndum del 23 de junio.

Este impulso del PIB británico se debe sobre todo al buen rendimiento del sector servicios, que aporta casi un 80% a la economía nacional. El sector servicios ha crecido un 0’8% este trimestre y eso ha compensado las caídas de otros sectores. El de la construcción ha caído un 1’4%; el agrícola, un 0’7% y el de la producción de bienes un 0’4%.

Dentro del sector servicios destaca en especial la industria del cine, con el estreno en julio de Ghostbusters, Jason Bourne y Star Trek Beyond y las industrias de transporte, almacenamiento y comunicación.

Según la oficina de estadística de Reino Unido, el Brexit parece no afectar la pauta de crecimiento del país, al menos todavía. Y esto da alas a los partidarios del Brexit, que aseguran que todas las preocupaciones que giraban en torno a un duro impacto tras la salida de la Unión Europea no eran más que puro alarmismo.

El PIB de Reino Unido ha crecido un 2’3% en comparación con el tercer trimestre del año anterior. Es decir, este trimestre la economía de Reino Unido ha crecido al mayor ritmo en más de un año. Sin embargo, algunos economistas advierten que el verdadero reto todavía está por llegar.