El director general de la Asociación de Transporte Internacional por Carretera (ASTIC), Ramón Valdivia, ha analizado aquí, en Capital Radio, cómo puede afectar al sector del transporte la idea del Gobierno de crear un nuevo impuesto sobre el uso de las carreteras. Para ASTIC, “cobrar por el uso de las carreteras sería un golpe a la competitividad de la economía española”.
Ramón Valdivia, director general de ASTIC, explica su postura sobre el anuncio del gobierno
Desde ASTIC recuerdan que dos tercios de lo que España exporta, va hacia la Unión Europea y se transporta sobre todo en camión, por lo que sería “todo un golpe hacia la competitividad de la economía española interna y, sobre todo, externa”.
Valdivia añade que “ponerle una nueva tasa o impuesto a esta actividad de transporte, que hace que los exportadores tengan un sistema eficiente, eficaz, rápido y flexible para entregar sus mercancías puntualmente a todos los clientes europeos, lo que hace es encarecer.
Además, según el director general de la asociación, “resta competitividad al gran esfuerzo que hicieron las empresas exportando y buscando clientes fuera de España a raíz de la inmensa crisis que arrancó en este país en el 2008”.
¿El nuevo impuesto? “Sería un repago”
Por otro lado, Ramón Valdivia cree que, con este impuesto, se pagaría dos veces por el mismo servicio:
“Hay una falacia de fondo. Se dice que se está pagando por usar, como si no lo estuviéramos ya pagando. Para nosotros, esto sería un repago. Los usuarios de las carreteras aportan a las arcas del estado, solamente en el impuesto al hidrocarburo, 11.000 millones de euros al año”.
Valdivia defiende que “lo que hace falta no es dinero para poder sufragar los gastos de mantenimiento, sino una coherente y sensata asignación de recursos”.
Otro de los problemas para el sector es la incertidumbre, ya que no conocen ni las cantidades de este nuevo impuesto, ni sobre en qué usuarios repercutiría, ni en qué fecha acabará entrando en vigor.