A pocos días de la celebración del Día Internacional de la Mujer, los Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) estiman que la brecha salarial entre hombres y mujeres es 4.849 euros. En otras palabras, cobran un 30% menos que los hombres. A este ritmo, harían falta 87 años para eliminar estas diferencias. 

En otros casos es peor. En Galicia, se necesitan 615 años para eliminar la brecha, en La Rioja 421 años, Asturias 179 o Cantabria algo más de 100 años. Por eso, el secretario general de Gestha, José María Mollinedo, pide medidas al Gobierno para erradicar esta situación.

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Los técnicos de Hacienda explican que las causas de la brecha salarial se deben, por un lado, a que las mujeres ocupan mayoritariamente los trabajos más precarios, con jornadas parciales y sueldos anuales por debajo de los 7.400 euros.



Fuente: GESTHA

Para Miguel Ángel Robles, de La Neurona, el problema viene por el lado de la educación.

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Sebastián Reyna, de Upta, cree que las mujeres siguen ocupando puestos inferiores a los hombres, por eso cobran menos.

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2 de cada 10 mujeres en el "top salarial"

A partir de los 60.000 euros anuales, las mujeres apenas copan un tercio de los puestos de trabajo, desplomándose a casi dos de cada 10 trabajadores en el 'top salarial' con ingresos de más de 126.000 euros, donde además la brecha salarial de las mujeres más cualificadas es mayor hasta los 18.000 euros anuales, un 14% de su sueldo medio.

Las áreas geográficas con mayores desigualdades serían Ceuta y Asturias, donde las mujeres cobran un 37% menos. En el otro lado de la balanza, las menos desiguales serían Canarias y Extremadura, comunidades en las que aun así las cobran de media un 20% menos, debido a los bajos sueldos de los hombres en estos territorios.

La diferencia de sueldos aumenta con la edad 

Los cálculos de Gestha demuestran que la brecha salarial aumenta con la edad, intensificándose en las edades donde se concentra la maternidad y el cuidado de los mayores.

Los saltos más significativos se producen a partir de los 36 y 46 años y las mayores diferencias de sueldo entre unos y otras se localizan a partir de los 65 años, una edad en la que la brecha supera los 11.400 euros.